¿Te falta espacio de almacenaje para la ropa? Lo cierto es que éste es uno de los males más comunes de todos los hogares en los últimos años. Pero ya sabemos que un héroe Greencut tiene solución para todo, y en esta ocasión no iba a ser diferente. Hacer el interior de un armario empotrado puede parecer muy complicado, pero con las herramientas adecuadas, algo de paciencia y nuestras indicaciones, lo vas a conseguir fácilmente.
Precisamente de ello te vamos a hablar en este artículo. Toma nota, porque te contamos paso a paso todo lo que necesitas para hacer el interior de tu nuevo armario empotrado. Además, te damos algunas opciones sobre cómo puedes cerrar el frontal y aportamos algunas ideas por si no tienes el hueco que necesitas para instalarlo.
Cómo hacer el interior de un armario empotrado paso a paso
Si no sabes cómo hacer el interior de un armario empotrado, te recomendamos que sigas los siguientes pasos. Es importante que los tengas todos en cuenta, ya que se trata de un trabajo que conlleva cierto esfuerzo y no resulta nada agradable llegar al final y encontrarte con un resultado que no sea de tu gusto.
Planificación
Lo primero que debes hacer es planificar todos los aspectos que rodean a tu nueva creación. Tienes claro que necesitas un armario empotrado, pero ¿has seleccionado ya el hueco en el que lo vas a ubicar? ¿Es el espacio adecuado para tus necesidades? ¿Cuentas con las herramientas y los materiales necesarios? Si es así, sigamos adelante.
Toma de medidas
Cualquier mueble hecho por ti mismo requiere de una toma de medidas detallada, así que imagina el caso de un armario empotrado, que deberá ir completamente ajustado a la pared. Cuando hayas dado este paso, si ya cuentas con las maderas necesarias para el forrado, puedes empezar a cortarlas y colocarlas, taladrando previamente la pared y ajustando los agujeros en la madera para atornillar.
Diseño
Cuando hablamos de diseño, damos por hecho que ya has seleccionado y adquirido la madera necesaria, por lo que nos centramos en las necesidades que debe cubrir tu nuevo armario empotrado. Por lo general, no pueden faltar la barra para las perchas y algunas baldas o cajones; pero, en cualquier caso, debes tener en cuenta el espacio y las medidas a la hora de diseñarlo. Te recomendamos que lo dibujes como puedas en papel para hacerte una idea previa.
Modulación
En primer lugar, es importante que tengas clara la división de tu armario empotrado. Si la vas a separar únicamente en vertical o también en horizontal y el número de módulos que va a tener.
En este punto, lo más recomendable es completar el paso con la instalación de los separadores, para lo que te recomendamos que las unas entre sí del modo más seguro posible. Utiliza tacos, tornillos y, a poder ser, cola de contacto.
Ajuste de módulos
Ahora que ya tienes tu armario empotrado casi listo y dividido en los sectores que has creído convenientes, es hora de instalar los elementos de almacenaje. Te recomendamos adquirir la barra para las perchas ya a medida y de un material resistente, además de atornillarla con mucha seguridad a los extremos del armario.
Las baldas son el elemento más fácil de instalar, ya que sólo deberás prestar atención a que los soportes se encuentren a la misma altura y colocarlas donde quieras. Los cajones, por el contrario, requieren de una total atención a las medidas, tanto en las propias maderas como en la altura y la alineación de los raíles laterales. De lo contrario te darán problemas toda la vida.
Frontal y remates
Los frontales y los remates son una cuestión más estética, por lo que dependerá de tus elecciones decorativas y de si piensas dejarlo al aire -muy de moda actualmente- o poner cortinas o puertas. Si te decantas por esta última opción deberás escoger entre corredera o practicable y hacer una instalación muy precisa.
Finalmente debes decidir si te decantas por forrar tu armario empotrado y nuestra recomendación es que lo hagas ya que los beneficios que tiene son enormes: organización, higiene, diseño…
¿No tienes un hueco para tu armario empotrado? Invéntalo
En ocasiones lo más complejo es encontrar el espacio adecuado para instalar el armario empotrado. Cuando encuentras el hueco de manera natural, como puede ser el bajo de una escalera o cualquier rincón de la casa con un tamaño aprovechable, la ubicación se escoge por sí sola. Pero, ¿qué ocurre si quieres situarlo en un lugar donde no quedaría empotrado entre dos paredes?
La solución está en tu imaginación. Selecciona el emplazamiento y las medidas y sigue paso a paso todas las indicaciones que te hemos dado. Cuando termines, únicamente te queda instalar una nueva pared forrando el lateral del mueble que quedaba al aire. Un pequeño muro de cartón-yeso y el mismo color de pintura que el resto de la estancia, y ya tendrías listo tu armario empotrado.