Los jardines mediterráneos son ecológicos, de fácil mantenimiento y preciosos. Si vives en el litoral mediterráneo o en zonas del interior donde el clima no es extremo, puedes crear el tuyo propio para disfrutarlo todo el año.
Los jardines mediterráneos se adaptan bien a lugares de invierno benignos y a los veranos de sequía, aunque no al clima desértico de otras zonas de nuestra geografía. Son fáciles de cuidar y sostenibles porque no son exigentes con el riego y reducen al mínimo las praderas de césped, decantándose por otros materiales como los suelos de barro y la grava.
A cambio, las zonas de sombra, el agua y las flores conforman espacios deliciosos donde disponer de un auténtico oasis al aire libre.
Características de los jardines mediterráneos
Los jardines mediterráneos se caracterizan por combinar elementos, y crean varios focos de interés en el jardín, que invitan a recorrer con la vista diferentes rincones. Esto les dota de misterio y los agranda a la vista.
- Árboles de sombra. Los jardines mediterráneos promueven el frescor y la sombra para combatir los sofocantes veranos de nuestras latitudes.
- Rocallas con aromáticas y plantas de flor. Se trata de agrupaciones de piedras, plantas resistentes, flores y a menudo grava, que simulan pedazos de naturaleza en el jardín.
- Arbustos. Impiden que el viento arrase el jardín y mantienen el microclima. Deben mantenerse siempre perfectos con un buen cortasetos.
- Frutales. No hay jardín mediterráneo sin uno o varios frutales, especialmente algún cítrico.
- Detalles decorativos. Pueden ser senderos, fuentes o estanques, bonitas macetas de barro crudo o esmaltadas con plantas de flor.
- Materiales. Asociamos el jardín mediterráneo a elementos tradicionales como los azulejos decorados, las tejas, las paredes encaladas, los balcones con enrejados, la forja…
El uso racional del agua en el jardín mediterráneo
Los jardines mediterráneos son muy eficientes en lo que se refiere al consumo de agua. No son extremadamente exigentes, y pueden aguantar días sin riego, siempre que no haya una ola de calor extremo en verano. De hecho, la xerojardinería, es decir, la planificación de los jardines con un criterio de racionalización del uso de agua, copia algunas de las pautas del jardín mediterráneo.
La base de este tipo de jardín pivota en torno a la creación de tres zonas diferenciadas en función de la cantidad de agua que necesitan:
- Zona seca con las plantas menos exigentes con la humedad.
- Zona de riego moderado, donde se ubican las plantas con más necesidad de agua, pero que actúan como tapizantes, promoviendo el frescor en el jardín.
- Zona húmeda, a la que se dedica menos espacio.
10 consejos para planificar y cuidar jardines mediterráneos
- Planta césped en una mínima parte de la superficie para evitar el despilfarro de agua, un bien escaso en nuestras latitudes. Escoge un césped que resista la sequía.
- Crea un buen drenaje para evitar encharcamientos. El exceso de humedad es el enemigo número uno del jardín.
- Observa el suelo y corrige su alcalinidad, salinidad, exceso de arcilla con sustratos especiales, nutrientes, etc.
- Gradúa el cortacésped para no segar a ras. Un césped más largo es menos exigente con el riego. Practica el mulching, y deja una capa de hierba cortada para mantener la humedad.
- Delimita la pradera de césped con las plantas que necesitan más riego, formando borduras o arriates.
- Ubica las rocallas en montículos, donde lucen más.
- Protege la zona de estar del sol con árboles de sombra y pérgolas con plantas trepadoras como glicinia, parra, etc.
- Protege el jardín del viento con setos, vallas con brezo o plantas trepadoras como el jazmín, la buganvilla…
- Planta las especies más necesitadas de riego (azalea, alegrías…) en la zona sombreada del jardín.
- Alterna plantas caducas y perennes, como todas las coníferas (hojas de aguja), para que el jardín mantenga su encanto en invierno.
Mejores plantas para jardines mediterráneos
- Árboles de sombra: ciprés, mimosa, jacaranda, palmera…
- Arbustos: tuya, laurel, evónimo, boj, arizónica…
- Frutales: naranjo, limonero, higuera, olivo, almendro, cerezo…
- Plantas aromáticas: romero, tomillo, santolina, lavanda, salvia, menta, orégano…
- Plantas trepadoras: jazmín, glicinia, duranta, buganvilla, campsis…
- Plantas con flores: geranios, gitanillas, hibiscos, gazanias, crisantemos, verbena, vinca, clavelina, tagetes…
Como has visto, proyectar y crear tú mismo uno de los tradicionales jardines mediterráneos con criterios ecoeficientes y las especies adecuadas te permite cuidarlo más fácilmente y adaptarlo al entorno, ahorrando agua. ¿Te animas?
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